VISIÓN DEL SER HUMANO Y PRINCIPIOS:
Principios
Existen varios Principios Universales en nuestra filosofía institucional que nos inspiran y los cuales nos esforzamos por aplicar individual e institucionalmente. Algunos están a continuación:
Los 3 Esenciales:
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Amor Trascendente: A diferencia del amor común de la sociedad moderna (al que llamamos enamoramiento), el Amor Trascendente lo definimos como "todo lo que se hace y deja de hacer para que el ser amado (nosotros mismos y todos) crezca integralmente y/o viva en armonía y paz". El Amor, antes que sólo sentimientos, son las acciones positivas y constructivas concretas a favor de la vida propia y ajena; son hechos y obras que apoyan compasivamente a la evolución de la conciencia. El Amor es el fruto del árbol. No obstante, el amor también incluye a los pensamientos, sentimientos y palabras más nobles y elevadas a favor de la vida del ser amado. El Amor es la fuerza más poderosa del Universo y es la esencia de todo. El Amor es la respuesta. El Amor es todo lo que hay. El Amor somos cada uno de nosotros.
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Alegría Trascendente:
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La Verdad Trascendente:
Principios Universales Fundamentales:
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Firmeza vs rigidez
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Ambientes y oportunidades vs directividad
Base filosófica para los lineamientos y políticas Institucionales:
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El Instituto para el Crecimiento Integral acepta y apoya al crecimiento de toda persona sin importar cual sea su credo, raza, cultura, orientación sexual, afiliación política o cualquier otro tipo de aparente diferencia. En nuestra institución todos son bienvenidos para el trabajo de crecimiento integral y el trabajo de los ideales que nos inspiran.
Visión del Ser Humano
Nosotros vemos a los humanos como seres integrales, sistémicos y transpersonales que están en un proceso de evolución de la conciencia y avanzan hacia su autorealización, mientras interactúan con el mundo que les rodea. Esta integralidad se manifiesta en la interacción e interdependencia entre las diversas facetas psico-bio-sociales del ser humano que por fines didácticos pueden ser agrupadas/resumidas en 4: físicas, emocionales, intelectuales y existenciales (espirituales pero no-necesariamente religiosas).
Si el ser humano ha de experimentar este proceso de evolución de su conciencia de una manera armónica, sana y feliz, parece necesario que sus 4 facetas se desarrollen, transformen e interactúen también en forma armónica y equilibrada. Pero, al mismo tiempo, para que se de una efectiva transformación de las 4 facetas, se requiere un cambio significativo y duradero en el comportamiento humano; cambio que creemos se manifiesta con el desarrollo de virtudes y cualidades concretas.
Por lo tanto, todos nuestros programas, estrategias, técnicas educativas, clases, asesoramientos y demás servicios, contemplan y promueven el desarrollo armónico y equilibrado de virtudes y cualidades físicas, emocionales, intelectuales y existenciales.